Dr. Daniel Botkin explica la lingüística de los nombres “Yeshúa” y “Yahshua” y cómo Yahshua es una mala transliteración por parte de los Defensores del Nombre Sagrado para hacer caber una interpretación errónea del Juan 5:43 y cómo es que Yeshúa es mucho más cierto. También establece el hecho de que el nombre inglés “Jesus” no tiene absolutamente ninguna conexión pagana y es sencillamente un derivado de “Yesous,” la transliteración griega de “Yeshúa.”
¿El Nombre del Mesías en Hebreo:
Yeshúa o Yahshua?
Escritor: Dr. Daniel Botkin
Traductor: Michael Joseph Navarro
El nombre hebreo del mesías normalmente se traduce
como Yeshúa o Yahshúa. Bajo circunstancias normales no me molestaría con escribir
un artículo tocante algo tan trivial, tan frívolo, como la diferencia entre los
sonidos vocales de “e” y “a.” No obstante, existe la necesidad de abordar al
tema porque algunas personas quienes usan la forma del nombre Yahshua dicen cosas falsas de los que
usan la forma de Yeshúa. Los
opositores de la forma Yeshúa afirman que esta pronunciación es el resultado de
una conspiración judía de esconder al nombre verdadero del Salvador. Se le
acusa a aquellos quienes llaman Yeshúa al mesías de
perpetuar una conspiración judía y de “negar Su nombre” o de “menospreciarle”
por su uso de Yeshúa. Si nunca ha leído u oído de estas acusaciones
extravagantes, es probable que así lo sea eventualmente. De vez en cuando
recibo cartas personales de esta clase.
Los
que proponen la forma Yahshua alegan que el nombre del mesías era la misma que
la de Josué, escrito יהושע o יהושוע (concordancia Strong’s #3091). El único problema es
que ninguna de estas deletreadas hebreas del nombre de Josué con alguna
probabilidad posible se puede pronunciar “Yahshúa.” La tercera letra del nombre
de Josué (leyendo de la derecha a la izquierda) es la letra vav (ו) y una vav no puede ser muda. La letra vav se tiene
que pronunciar como una “v,” “o,” o “u.” En el caso de Josué, lleva el sonido de o, dándonos a
“Ye-jó-shu-a.” Strong’s confirma esta pronunciación.
Para que un nombre sea pronunciado
“Yahshúa” tendría que haber sido escrito: שוע-יה, y no existe tal nombre en ninguna parte de la Biblia hebrea. Empero,
no tiene que tomar mi palabra en esto. Dr. Danny Ben-Gigi dice tocante de la
forma Yahshúa que “no existe tal nombre en hebreo” y que “la gente lo inventó
para hacer caber su teología.” [1] Dr. Ben-Gigi es israelita y fue
el jefe de los programas hebreos en la Arizona State University [Universidad
Estatal de Arizona]. Es el autor del libro First
Step in Hebrew Prayers [Primer Paso de Oraciones Hebreas], y diseñó y
produjo al curso para aprender al hebreo “Living Israeli Hebrew” [Hebreo
Israelí Viviente]. Dr. David Bivin, un cristiano, dice que la forma Yahshúa
“tiene raíces en un malentendido.” [2]
Dr. Bivin es un erudito reconocido del hebreo, maestro, y autor de Fluent Biblical Hebrew [Hebreo Bíblico
Fluente].
No
conozco a un solo individuo quien conoce al hebreo tan bien actualmente como
para leerlo y entenderlo y conversarlo quien usa la forma Yahshua. Por favor,
no malentienda. Una persona no necesita conocer las lingüísticas griegas y
hebreas para ser espiritual. No obstante, si una persona se va poner encima el
cargo de instruir a los demás tocante temas de naturaleza lingüística y hebrea,
entonces debería de conocer al idioma hebreo y debería de saber algo sobre los
fundamentales lingüísticos. Esto especialmente es verdad si es que va a usar
sus enseñanzas basadas en la lingüística hebrea para acusar a sus hermanos de
ser parte de una “conspiración judía” para “negar al nombre verdadero del
mesías.”
Para
la gente quienes en actualidad conocen al hebreo – personas como el Dr.
Ben-Gigi, Dr. Biven, y otros – es muy obvio que aquellos quienes insisten usar
la forma Yahshúa conocen muy poco sobre el idioma hebreo. El único hebreo que
la mayoría de estos seres, quienes por sí mismos proponen ser expertos, saben
es lo que pueden aprender de las concordancias como Strong’s.[3]
Strong’s es una gran herramienta para el estudio, pero no es medio por el cual
una persona puede aprender al idioma hebreo.
La forma inglés Jesus es derivado del griego del nuevo
testamento Іhsouβ, pronunciado “Yesous.”
De acuerdo a Strong’s, Yesous (Strong’s #2424) es de “origen hebreo” y puede
trazarse hasta el nombre judío de Josué, Yejóshua (#3091, יהושוע) [en inglés Yehoshua]. ¿Pero cómo es que terminamos
con el Yesous en griego desde el Yejóshua del hebreo? Pueda que alguien que
solo esté armado con la concordancia Strong’s tenga dificultad lograr encontrar
respuesta a esa pregunta. Pero alguien quien lee la Biblia en hebreo sabe que
el nombre Yejóshua aparece a veces en su forma abreviada Yeshúa ישוע en Nehemías
8:17 aparente también en versiones en inglés: “Jeshua son of Nun” [Jeshúa hijo
de Nun] (la letra J en el inglés antiguo se pronunciaba como una Y). Strong’s no le avisa al lector que
el Yesous griego en actualidad es transliterado de esta forma hebrea abreviada,
Yeshúa, y no directamente de la forma más larga Yejóshua. El proceso de
“Yejóshua” a “Jesus” se mira así:
del hebreo Yejóshua ® hebreo Yeshúa
del hebreo Yesha ® griego Yesous
del griego Yesous ® inglés Jesus
Dentro
del griego no existe el sonido “sh,” cual rinde cuentas por al sonido de “s” en
Yesous. La “s” al final del nombre griego es necesaria gramáticamente para que
la palabra sea entendible. En Nehemías 8:17, el nombre de Josué está escrito
100% idéntico como el nombre cual los judíos mesiánicos usan para el mesías,
Yeshúa (ישוע) [también
se puede pronunciar Yéshua]. Strong’s confirma esta pronunciación, y nos
informa que existieron 10 israelitas en la Biblia quienes tuvieron este nombre
(#3442). Entonces la abreviación de Yejóshua a Yeshúa antedata la era cristiana
por lo menos 500 años, y no puede ser el resultado de una conspiración judía
para esconder el nombre verdadero del Salvador.[4]
El reclamar que la forma abreviada Yeshúa es el resultado de una conspiración
judía es ignorar los hechos de la historia y las verdades de la Escrituras
Hebreas. La forma Yeshúa existió por cientos de años antes de que naciera el
mesías. Hasta dentro de la Septuaginta pre-cristiana miramos la forma griega de
IHSOUS (Yesous) en el título del libro de Josué (Esto también comprueba que
Yesous no tiene conexión al dios pagano Zeus).
¿Entonces
de dónde salió la transliteración Yahshúa? Esta forma del nombre se puede
trazar a los comienzos del movimiento del Sacred Name (Nombre Sagrado), un movimiento
que surgió de la Church of God (Iglesia de Dios) 7º día, a fines de los 1930’s.
Tengo en mis archivos un artículo titulado, “A Brief History of the Name Movement in America” (Una Historia
Breve del Movimiento del Nombre en América) por L. D. Snow, un creyente del
Nombre Sagrado.[5] De
acuerdo a este artículo, “John Biggs y Paul Penn fueron los PRIMEROS en
pronunciar y usar al nombre Yahshua” (énfasis por parte de Snow). Esto fue en
el 1936 y 1937, declara el artículo. No se da información del cómo es que Biggs
y Penn sacaron esta (mala) traducción.
Más
tarde, literatura del Nombre Sagrado presentan una apelación de la declaración
del mesías en Juan 5:43 como “prueba” de la forma Yahshúa: “He venido en el
nombre de mi Padre.” En el pensamiento de los creyentes del Nombre Sagrado,
esto significa que, “Yah,” una forma
abreviada de Yahweh, tiene que
aparecer escrito dentro del nombre del Hijo. Empero, el mesías no dijo, “El nombre de mi Padre tiene
que aparecer escrito adentro de Mi nombre” o alguna declaración semejante. Aquí
no dijo absolutamente nada tocante Su propio nombre. El único nombre que aquí
se menciona es el nombre del Padre. Él dijo, “He venido en el nombre de Mi
Padre,” que sencillamente significa que Él venía autorizado por Su Padre, patrocinado
por Su Padre. Si tomáramos la declaración de Yeshúa “He venido en el nombre de
Mi Padre” a que tuviera el significado de que Su nombre tenía que incluir
escrito/deletreado/pronunciado el sonido del nombre de Su Padre, entonces al
menos que nuestros nombres personales contengan la sílaba “Yah” nosotros mismos no podemos hacer nada en el
nombre del Padre. La necedad, la torpeza, de esta interpretación también es
evidente si esa misma línea de razonar se aplica al restante de la declaración
de Yeshúa, “… si otro viniera en su propio nombre a éste recibirías.” Si
la lógica de los proponentes del Nombre Sagrado se aplica a esta mitad del
verso, estaría diciendo “el nombre de una persona tiene que incluir su nombre
dentro de su nombre,” cosa que no hace sentido. Por otro lado, si “en su propio
nombre” significa “por su propia autoridad,” entonces la declaración hace
sentido.
¿Por qué es que la
forma Yahshúa no se usa excepto por los proponentes del Nombre Sagrado y
personas influenciadas por creyentes del Nombre Sagrado? Probablemente porque
no existe tal nombre dentro de la Biblia hebrea y, que yo sepa, tampoco existe
tal nombre dentro de la literatura hebrea que no es bíblica. Parece que el Dr.
Ben-Gigi está correcto cuando él dice que la gente inventó al nombre Yahshúa
para hacerlo caber dentro de su propia teología.
He
leído mucha literatura por escritores quienes buscan exponer los “errores” de
aquellos quienes se refieren al mesías como Yeshúa. La única cosa que ellos
exponen es su falta de conocimiento. Podría dar varios ejemplos de
declaraciones que son absolutamente ridículos, no tengo el espacio en esta
publicación para dar todos los que tengo en mis archivos, y no deseo avergonzar
a gente sincera por sus esfuerzos honrados aunque mal encaminados. Empero,
existen algunos ejemplos que groseramente mal representan los hechos, y algunos
de estos ejemplos se tienen que descubrir.
Dentro
de un libro/folleto popular publicado por una organización muy conocida del
Nombre Sagrado, el autor anónimo hace esta declaración, “La mayoría de las
obras de referencia concuerdan con la declaración en el Kittel’s Theological Dictionary of the NT [Diccionario Teológico
Kittel del NT] en la página 284, cual declara que el nombre Yajóshua [ellos en
inglés lo escriben Yahoshua] se abrevió después del exilio a la forma corta de
Yahshúa.” Esta declaración suena como que Kittel utiliza las formas de Yajóshua
y Yahshua. Fui a la biblioteca y busqué esta página en Kittel’s. Las palabras
Yajóshua y Yahshua no aparecen ni una sola vez en esta página. Esto se puede
verificar con ir a cualquier biblioteca (es el volumen III). Si su biblioteca
no contiene a Kittel’s, yo le puedo mandar una copia de la página a los
escépticos.
Esta
misma organización del Nombre Sagrado que ha mal representado a Kittel’s
también representó falsamente a un autor judío. Dentro de una revista un
artículo escrito por el líder principal de esta organización se cita un
segmento extenso de un libro publicado por KTAV, una casa publicadora judía. Al
copiar esta referencia para su revista, este autor del grupo del Nombre Sagrado
liberalmente usó Yahshua haciéndolo parecer como que el autor judío usaba esa
transliteración en su libro. Saqué este libro de la biblioteca y descubrí que
"Yahshua” este libro. Le escribí a este líder de los Nombre Sagrado
pidiéndole una explicación. Le escribí que al menos que tuviera otra
explicación, yo podía concluir solamente una de tres cosas: intencionalmente
mal representó los hechos, lo hizo accidentalmente, o el libro que saqué de la
biblioteca era una versión diferente del que él había usado y en ese caso yo le
debía una disculpa. Le mandé la carta en setiembre del 1997 y todavía estoy
esperando la respuesta de su parte. No avergonzaré a este hombre con mencionar
su nombre ni el de su ministerio. No es mi intención avergonzar a la gente.
No
estoy escribiendo este artículo para persuadir a la quien sea que dejen de
decir “Yahshua.” Si la gente desea continuar con el uso de una mala
transliteración que fue inventada por los primeros pioneros del grupo del
Nombre Sagrado quienes no entendían el hebreo, en verdad a mí no me importa. Yo
no pienso que la sustitución de un sonido de “ah” por la “e” le importe mucho
al Señor tampoco. Empero, lo que sí importa es promulgar rumores falsos contra
los judíos mesiánicos y otros quienes le llaman al mesías ‘Yeshúa.”
Pablo
le advirtió a Timoteo tocante los que “están obsesionados con cuestiones y contiendas de
palabras, y discusiones que resultan en envidias, conflictos, insultos, malas sospechas
y peleas constantes” (1 Timoteo 6:4). Desafortunadamente, esta es una
descripción certera de lo que sucede entre mucha gente dentro del movimiento
del Nombre Sagrado. Personalmente, prefiero juntarme con gente no contenciosa
quienes le llaman al mesías “Jesús” que con gente contenciosa quienes insisten
que todos le llamen “Yahshua.” t
[1]
Periodico Love
Song to the Messiah (Cantico de Amore Para el Mesias) Marzo 1999,
pag. 1
[2]
“The Fallacy of
Sacred Name Bibles” [El Error de las Biblias de Los Nombres Sagrados], Jerusalem Perspective, Nov-Dic 1991, pág.12.
[3]
Estos maestros
dependen mucho de concordancias como Strong’s. ¡Mas cuando Strong’s les prueba
mal, como lo hace con la pronunciación de Yejóshua, ellos insisten que Strong’s
está en error! Todo lo que uno tiene que hacer para ver la pronunciación del
nombre de Josué pueden mirar una Biblia hebrea y averiguar que Strong’s utilizó
los mismos puntos vocales. Y también se puede ver que los judíos no esconden al
nombre porque en ortos lados usan al nombre, por ejemplo, Yirmeyahu=Jeremías,
Yeshayahu=Isaías, Zephanyah, Zekaryah, etc.
[4]
Existe debate
por si sí o no la abreviación final de los judíos del nombre de Jesus a del nombre de Jesus a Yeshu (ישו) fue un intento premeditado para evitar dar reconocimiento a
Yeshúa como Salvador.
[5] Este artículo primeramente apareció dentro de una publicación llamada The Eliyah Messenger [El Mensajero Elías], mayo-junio del 1966, y se volvió imprimir en el 1975 en World Today Analyzed [El Mundo Analizado Hoy], una publicación de la Asamblea de Yahvah en Tahlequah, Oklahoma, EEUU.